Las nuevas tecnologías se han convertido en un potente recurso socializador y educativo fuera de las escuelas, pero... ¿y dentro de ellas? ¿están teniendo el mismo efecto?
Creemos que estos recursos tecnológicos están integrándose muy lentamente en el currículum escolar, lo que lleva a cierta incongruencia con la realidad de los estudiantes ya que no están implantándose de la manera más correcta en los colegios.
Desde el conocimiento adquirido en nuestras prácticas pudimos comprobar como en las aulas ordinarias, las NNTT eran usadas como métodos auxiliares para la enseñanza de algunas de las asignaturas convencionales. Sin embargo, nosotras creemos que las TIC o NNTT deben ir mucho más allá en el campo de la educación. Pensamos que deben transformar la misma con el fin de acercar la escuela a nuestra sociedad, la sociedad de la información. Concretamente, los cambios que consideramos necesarios deben centrarse en el rol de los profesores y en currículum.
Con respecto al primero, los profesores deberán pasar de ser transmisores de conocimiento a ejercer, en gran medida, una tutoría direccional y de intermediario entre el alumno y los conocimientos que deben aprenderse, y que no es preciso que la transmita directamente el profesor. También de hacerles notar la diferencia de calidad entre las distintas informaciones.
Este cambio, también implica aprender o analizar el lenguaje audiovisual ya que en el futuro no muy lejano, nos llegará toda la información en este lenguaje.
Con respecto al segundo cambio, las NNTT deben modificar el currículum en el sentido de que en esta nueva sociedad, ya no interesa tanto lo que uno pueda saber sino lo que es capaz de aprender. El currículum debe centrarse en la formación de los recursos personales para el mundo laboral y en enseñar a los alumnos a desaprender, es decir, a aceptar que toda la información que uno posee no es válida.
En conclusión, si no acercamos las TIC habrá una línea separatoria entre éstas y la realidad de los estudiantes, pero este hecho implica grandes transformaciones en las escuelas. ¿Estamos preparados para ello?